Los Mitos sobre los Jóvenes y los Viejos
Cuando se trata de dinamizar grupos, casi siempre se piensa en los jóvenes. Su cualidad vibrante, su salud rebosante, su capacidad para entusiasmarse con todo, y de arrastrar a los demás, sin olvidar algo muy importante: su idealismo y generosidad…
Por contra los “mayores” son todo lo contrario. Su escasa salud, los desengaños acumulados a lo largo de la vida, hacen que su desconfianza les impida ser entusiastas. Por otro lado, por esas mismas razones, y con el paso del tiempo habiendo superado el “mezzo del cammin della nostra vita”, las ganas de aventuras y el idealismo han dejado paso a la pereza y al egoísmo.
¿De verdad? ¿Es esto siempre así? Nada es siempre lo mismo en un mundo cambiante, en el que las generalizaciones son muy engañosas.
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