EL EFECTO MARIPOSA Y EL MUNDO NUEVO
Qué hacer cuando todo se descompone a tu alrededor y sientes que todo se ha vuelto difícil y complicado. ¿Qué es lo que define los "tiempos difíciles" ¿guerras? ¿hambrunas? ¿pestes?
Guerras siempre ha habido, es algo que casi define al ser humano o más bien a todos los antropoides, porque también éstos organizan guerrillas. Las hambrunas también han sido frecuentes. Precisamente lo que ha precipitado la caída de muchos regímenes es la creciente oposición de los "estómagos vacíos" contra los gobiernos. En cuanto a las pestes, éstas han sido la consecuencia del agravamiento de situaciones de colapso social endémico.
Un conjunto de todo lo anterior fue la llamada Guerra de los Treinta Años, algo que para los jóvenes de hoy puede parecerles como una leyenda o una lejana historia, pero que causó muchas muertes en Europa debido a la guerra, las pestes y las hambrunas que se siguieron de forma repetida. La población llegó a mermarse en cerca de un tercio, y fueron necesarios muchos años para recuperarse de aquella catástrofe.
Para imaginar lo que ello supuso, basta con comparar esos datos con el descontrol actual, teniendo en cuenta que ahora sólo ha sido afectada un muy pequeño porcentaje de la población, y no ha habido la destrucción y quema de tierras, ni la violencia de los ejércitos, ni la hambruna de aquella época.
Cada vez que estas cosas pasan anuncian caídas de imperios, o que comienzan su declinar. Un mundo nuevo se preconfigura, nuevos poderes se expresan en el escenario mundial, las cosas cambian sin que seamos totalmente conscientes de la profundidad de ese cambio.
Las olas de la historia arrastra al conjunto de la humanidad, y el papel que un ser humano común pueda tener en ello se vuelve ínfimo. Y ante esas olas hay que construir un bote salvavidas, una cápsula impenetrable que cruce a lo largo de las tormentas de esta Nueva Edad Media. Esa cápsula tiene dos vertientes, la personal y la social.
Como ser humano único, lo que yo haga, siendo una gota de agua en el océano de la vida, es muy poco, no tengo fuerzas para controlar lo que sucede en el mundo. Ciertamente. Ahora bien, como dice un viejo proverbio chino "El aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo", concepto que ha sido adaptado a las teorías cuánticas del caos. Curiosamente en eso es en lo que estamos inmersos, en el enorme caos de un mundo al revés, donde a los criminales se les cede paso y honor y donde los hombres buenos ven mancillados sus nombres.
Si tomo por un extremo una regla de un metro de largo y la muevo con mi mano, el arco que describe puede tener unos cuantos centímetros de longitud. Si en lugar de una regla de un metro tuviese una de 10000 metros, el arco que describiría sería de kilómetros de longitud, y cuanto más lejos llegue la regla más grande será el arco que describa, y los vientos que arrastre. De la misma manera, yo pequeño y débil individuo, cumpliendo con la tarea que me toca en este momento, mi pequeña tarea, con mis escasas fuerzas, pero bien proyectadas hacia un futuro lejano, hacia un futuro ideal, y trabajando para otros que ni siquiera conoceré o veré y no para mí mismo, entonces y sólo entonces, mi pequeño esfuerzo será como el batir de las alas de una mariposa que generará tremendas corrientes de aire vital, de ideales hermosos que fraguarán en una mejor sociedad y ser humano.
Para ello, con la suficiente humildad, pero al mismo tiempo confianza, debo creer en lo que hago y acorazar mi corazón y mi mente contra los embates del mundo, crear mi propio bote salvavidas, que consiste en ideas claras y firmes, para actuar, e ideales luminosos para alumbrar mi camino. Con esas dos cosas, ideas e ideales, nadie ni nada podrá hundir o destrozar tu bote, cruzarás las aguas turbulentas de esta Edad Media que se avecina, que llama ya a la puerta.
Y en la vertiente mundanal, no te dejes guiar por las sirenas del materialismo, por aquello que gritan prometiendo justicia y robando, prometiendo verdad y mintiendo, creyéndose orgullosamente sabios y estando muy lejos de la sabiduría, mientras que al mismo tiempo hacen gala de hermandad y amor fraternal, precisamente esos que no aman a nadie sino a sí mismos. Únete a los que piensan como tú, trabaja junto con ellos, hazte fuerte compartiendo, sintiéndote miembro de ese futuro luminoso y no esclavo del presente mundo viejo. Y así el batir de la mariposa, de las miles de mariposas, de los millones de mariposas, creará el Nuevo Viento de la Historia.
